Las puertas acorazadas son las más seguras que hay actualmente en el mercado, aunque también hay que decir que son las más caras, aunque eso no es motivo para que no se utilicen cada día más. Debido a la bajada en los precios de las puertas blindadas, las acorazadas se utilizan casi exclusivamente para acceder a cámaras o habitaciones en donde se guardan objetos de gran valor como joyas, antigüedades, grandes cantidades de dinero u obras de arte. Además, se utilizan también en museos y diversos centros de congresos, exposiciones y reuniones para proteger el material que allí se guarda.
Veamos sus principales características:
- Están compuestas de tubos de acero y hormigón especial, además de diversas aleaciones y rigidizadores, que son elementos que se insertan en la superficie de la puerta para que las chapas de acero tengan una mayor solidez y rigidez.
- Sobre las chapas de acero se colocan los tableros de madera, que puede ser de sapelli (el más barato), nogal, roble o pino (los más caros).
- Su principal característica y ventaja es que tiene una gran resistencia a cualquier ataque.
- Sus mecanismos de cierre se encastran en la estructura del marco, siendo su cerradura una de las más seguras del mundo al ser sus pestillo oblongos y rectangulares. Cuando la puerta de cierra, la cerradura se activa tanto en la parte frontal como en la inferior, superior y lateral.
- Otras cerraduras que se pueden instalar son las de combinación, que sirven para bloquearla y pueden ser mecánicas, electrónicas, digitales, retardadas… hay una gran variedad y todas ellas también con un gran nivel de seguridad.
- Las bisagras están dotadas de refuerzos que impiden la acción de palancas o sierras.
- Los anclajes son de hierro macizo y están formados totalmente por acero sin tener ningún punto vulnerable.
Las puertas acorazadas suelen rondar los 1.200€, dependiendo de la empresa o las medidas entre otras cosas, pero es un precio muy razonable ya que la seguridad que ofrecen es muy superior a cualquier otro tipo de puerta.